Soledad Herrera expone sobre la soledad en personas mayores

El pasado 7 de mayo se realizó en la ciudad de Madrid (España) una mesa redonda organizada por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), en donde se abordó la temática de la soledad como una problemática social del siglo XXI.

Invitada por el académico Esteban Sánchez Moreno (UCM), María Soledad Herrera, académica del Instituto y directora de Centro de Estudios de Vejez y Envejecimiento (CEVE UC), presentó los resultados de sus investigaciones en esta temática en una exposición denominada “Aislamiento, soledad y bienestar subjetivo en las personas mayores chilenas: una revisión de su evolución antes, durante y post pandemia del Covid-19″.

En su exposición, la académica presentó los resultados obtenidos a partir de tres estudios realizados; la Encuesta Nacional Calidad de Vida en la Vejez UC-Caja Los Andes desde el año 2007 al 2022, el Estudio ANID-COVID0041 de seguimiento de una cohorte de personas mayores durante la pandemia Covid-19, y una encuesta específica de soledad en personas mayores financiada por ANID-Fondecyt Regular 1220936.

Al revisar estos estudios se evidenció que existe un aumento sostenido de la sensación de soledad en las personas mayores, que no se puede explicar únicamente por el “envejecimiento de la vejez”.

Las personas mayores que viven solas han tenido más dificultades para recuperarse de la caída en el bienestar subjetivo durante la pandemia del Covid-19. Los cambios en las relaciones sociales y familiares en Chile, que es de donde se desarrollaron los estudios, pueden incidir en el aumento de la sensación de soledad por parte de las personas mayores” comentó María Soledad Herrera.

Con respecto a los cambios que se dan a nivel de relaciones sociales y familiares, la académica agregó que se refiere principalmente a “personas mayores que están solteras o sin pareja, también lo relacionado a la baja en la natalidad, las relaciones a distancia y también un contexto en donde las personas mayores pueden tener pocas o menos amistades”. Además, María Soledad Herrera, menciona que la calidad de los vínculos sociales está cruzada por el nivel socioeconómico.

Hay que destacar que existe una alta heterogeneidad socioeconómica en la calidad de los vínculos sociales en Chile, lo que afecta al sentimiento de soledad en las personas mayores, sobre todo en las de menor nivel socioeconómico. Los hombres están más expuestos a sentir soledad cuando no viven acompañados. Las mujeres cuidadoras se resienten en sus relaciones sociales, lo que muchas veces tiene como consecuencia un mayor sentimiento de soledad”.

Al ser consultada sobre la situación en España, comenta que al revisar las investigaciones realizadas por el académico Esteban Sánchez (UCM), se puede apreciar una diferencia principalmente en la calidad de los vínculos. En Chile los vínculos de amistad son más débiles que lo que sucede en el país europeo.

“(…) En nuestro país las personas mayores tienen pocos amigos, según la última Encuesta Calidad de Vida en la Vejez (2022), un 25% no tiene amistades a los 60 años y a medida que aumenta la edad ese porcentaje puede llegar al 50%. En Chile las redes familiares son más fuertes, los lazos de amistades son más débiles, en España eso es diferente, amistades y familia son redes más sólidas”.

La problemática de la soledad reviste un problema de carácter mundial y no es algo que afecte solo a las personas mayores. Si bien este grupo de la sociedad tiene mayores problemas vinculados a la ausencia de vínculos afectivos, para la académica “esto es algo intergeneracional, fuertemente marcado por los efectos de un mundo interconectado, muchas veces sobre conectado a través las redes sociales, pero el uso de estas herramientas no implica necesariamente una protección hacia el sentimiento de soledad”.

Frente a esta situación, María Soledad Herrera considera que el desafío es replantear la forma cómo se generan políticas y programas pensados en las personas mayores, evaluando su verdadero impacto con respecto al sentimiento de soledad y la construcción de vínculos.

Esto nos llama a repensar y replantearnos las políticas públicas, las actividades que realizan las organizaciones de la sociedad civil, los municipios, ministerios, a incentivar la participación de las personas mayores en distintas actividades. Nosotros nos hacemos la pregunta -¿en qué medida estas actividades efectivamente generan lazos más íntimos entre las personas y son una protección frente al sentimiento de soledad? – esto algo que aún estamos estudiando pero que sin duda representa un desafío para nuestra sociedad actual” agregó.

Nota realizada por la Coordinación de comunicaciones y vinculación con el medio CEVE UC.